Conflicto y disfuncionalidad en Juntas Directivas
La conflictividad en las Juntas Directivas es un asunto que puede darse con frecuencia en este ámbito. Sin embargo, ese contrapunteo, derivado en muchos casos de la diversidad, enriquece notablemente la labor de estas. Otra cosa es el factor ‘disfuncionalidad’, el cual sí atenta contra el espítitu de lo que es el deber ser de una junta directiva. Un hecho como el sus miembros no se escuchen puede ser una distorsión.
El tema fue abordado por Dan Konigsburg, líder global de Gobierno Corporativo de Deloitte, durante el reciente Foro Anual de Gobierno Corporativo, organizado por Deloitte y el CESA, con el apoyo del IFC, para analizar la trascendencia del GC en la generación de valor.
En esencia, señala Konigsburg, hay diverdas fuentes generadoras de conflicto en las Juntas Directivas: alta diversidad de expectativas respecto al rol de la Junta Directiva, mala información (inoportuna o inexacta), falta de confianza entre los codirectores y bajo desempeño del presidente de la Junta. Esta fuente de conflicto es muy importante, pues un presidente de Junta que desempeña a cabalidad su rol y ejerce liderazgo es capaz de controlar otras fuentes de conflicto.
Es importante, por ejemplo, que la Junta tenga la oportunidad de reunirse sin la presencia de miembros ejecutivos. Estas reuniones deben tener una periodicidad fija, para que cuando se lleven a cabo, los ejecutivos no las atribuyan a una falla en su gestión. También es útil que la Junta tenga unas reglas de juego definidas, que cada cierto tiempo haya una rotación a nivel de sus miembros y que ocasionalmente se cambie el lugar de reunión para que se vea favorecida la atmosfera de su reunión.
Finalmente, es clave tener en cuenta que los codirectores tienen diferentes personalidades y esto hace que se aproximen de diferente manera a las discusiones.
¿En qué consiste el conflicto a nivel de juntas Directivas?
Dan Konigsburg: Hay un conflicto que es saludable para las organizaciones y en gobierno corporativo lo conocemos como una tensión constructiva. En este caso, cuando la tensión está controlada, tener desacuerdos es bueno. En cambio, cuando los desacuerdos se vuelven difíciles de administrar, el conflicto se vuelve disfuncional y es dañino para las organizaciones.
¿Qué ejemplos de conflicto negativo ha observado a lo largo de su trabajo con estas instancias directivas?
En los conflictos disfuncionales las personas dejan de ser capaces de oírse unas a otras y no son capaces de expresar adecuadamente sus posiciones. Este tipo de conflicto distrae a la Junta Directiva de lo que realmente debe hacer, y por eso es negativo.
¿Qué síntomas se observan cuando una junta está experimentando esa dinámica disfuncional?
Un signo de esto es cuando durante las reuniones los codirectores no están muy participativos y no indican con suficiente apertura su punto de vista. Otro indicio de que algo no está funcionando bien en la Junta es cuando un codirector decide dejar de ser parte de la junta directiva sin una razón aparente. En estos casos es clave el rol del Presidente de la Junta. Debe estar atento a estos signos y tomar los correctivos necesarios antes de que el conflicto deje de tener solución.
¿Qué tipos de personalidades ha encontrado usted a nivel de miembros de junta?
Deloitte ha desarrollado una metodología sobre la manera como las personas interactúan en las organizaciones. Esto no es un análisis sobre características generales de personalidad, solamente sobre la manera como las personas se aproximan a los problemas en un escenario de negocios. Nosotros hablamos de 4 tipos principales: drivers, pioneros, integradores y guardianes. Cada uno de estos tiene diferentes características. A nivel de juntas directivas es clave tener en cuenta que cada uno es persuadido por información diferente. Si necesitas persuadir a un codirector que es un driver, debes usar sobre todo evidencia numérica, datos, gráficas, etc. En cambio, para convencer un pionero es más importante mostrarle una historia, una narrativa. Hablarle de la gente involucrada, transmitirle pasión por lo que se busca hacer. Por supuesto esto es una simplificación, no todo el mundo entra de manera absoluta en una única categoría, pero lo que buscamos es tener en cuenta estos diferentes enfoques para administrar mejor el conflicto en instancias como las juntas directivas.
¿Usted priorizaría alguno de estos tipo de personalidad en una Junta Directiva?
Normalmente en una junta siempre debe haber diferentes tipos de personas. Por eso justamente hoy en día se hace tanto énfasis en tener juntas directivas diversas. La diversidad en las juntas directivas suele conducir a mejores decisiones. Sin embargo, es cierto que en determinados momentos puede que uno de estos tipos de personalidad juegue un rol más crítico que otros. La situación de una organización que está en crisis es diferente a la de una organización que está pasando por un proceso de fusión con otra. Esto se debe tener en cuenta en el momento de componer una junta directiva para tener un balance adecuado.