El CESA reafirma su liderazgo en bienestar laboral con tercera recertificación EFR
Una década después de haberla obtenido por primera vez, el CESA logró renovar por tercera vez la certificación como empresa familiarmente responsable, EFR.
El reconocimiento fue recibido la mañana de este martes por la directora de Personas y Cultura del CESA, Besfania Vivas Hurtado, de manos de Roberto Martínez y Claudia Blanco, director general y directora para Colombia de la Fundación Más Familia de España -respectivamente-, institución que le dio vida a esta iniciativa.
Sin duda, se trata de un importante aval al papel que viene desarrollando la institución en promover una conciliación de las vidas laborales, personales y familiares de sus miembros, en un momento de alta complejidad para todos los trabajadores en el mundo, y que ha hecho vulnerable el equilibrio, componente relacionado cada vez más a la idea del éxito.
“Nos sentimos orgullosos de que los esfuerzos de hacer personas felices prevalezcan, y que (nuestros colaboradores) se sientan orgullosos de pertenecer a la institución”, expresó durante el evento Besfania Vivas. Además, destacó el hecho de que dentro de los niveles -todos favorables- como empresa familiarmente responsable, el CESA ascendió uno más, lo que constata su proactividad dentro del abanico de siete 'drivers' o componentes que permiten esa conciliación de vida laboral con otras dimensiones de un desarrollo humano integral. La responsabilidad social empresarial, la conexión con una sociedad mejor, la reputación de la marca/empleador, salarios emocionales, la experiencia, entornos diversos e inclusivos, y la salud y el bienestar integran este conjunto, en el que este último ha cobrado la mayor preponderancia en esta agrupación.
En este sentido, Besfania destacó que se haya fortalecido este último factor, sobre todo a lo que a salud mental se refiere, y enfatizó que “seguiremos trabajando en ello”.
Esta es una preocupación medular para el CESA, por lo que en el último año, desde el área de Éxito Estudiantil, se han venido fortaleciendo las capacidades para una debida atención en lo psicoemocional y académico. La institución, en específico, ha logrado crear una cultura en la que los profesores han sido claves para detectar señales de alerta en sus estudiantes, lo que ha permitido la intervención oportuna de Consejería u otras instancias.
Certificaciones de este tipo, como lo es la de EFR, explicó Claudia Blanco, arrastran a las instituciones que las persiguen a tener mecanismos y líneas de comunicación de prevención, por encima de la corrección y ser reactivas. Estas actividades ayudan a trabajar en diagnósticos, a conocer más a la comunidad y a atender necesidades puntuales o -en algunos casos- apremiantes. Ciertamente, afirmó esta psicóloga, “conciliación (vida-trabajo) no es café para todos. Más bien, (es) identificar muy bien cómo es la población del CESA, qué necesita, qué le vendría bien para quienes la conforman, y esas particularidades para poder activar mecanismos” que ayuden a ese equilibrio.
Al respecto, el vicerrector de Gestión Académica, Juan Carlos Aponte, destacó la importancia de esta certificación porque ayuda a la institución a organizarse más, lo que conduce a trabajar en los cambio de cultura.
“El orgullo de tener un reconocimiento de estas cualidades nos recuerda diariamente que más que cumplir con los indicadores, lo que cuenta es darle sentido a los mismos”, reflexionó Alejandro Noguera, vicerrector de Transformación y Experiencia.
Más Familia ha certificado a más de 100 empresas a lo largo y ancho del país. De estas, una decena son instituciones educativas, y la mayoría, universitarias. La primera IES en Colombia en obtener la certificación EFR fue el CESA. Y sigue en su camino por el bienestar de su comunidad y retener este flamante rótulo.