Habilidades para convertir al país en potencia bioceánica en 2030
02 Sep 2021
Un total de 20 altos oficiales de la Armada Nacional se formaron en conocimientos, técnicas y habilidades de negociación, en desarrollo del programa Gestión Estratégica del Poder Marítimo de la Nación, desarrollado por la Academia Naval de Estudios en asocio con el CESA.
Se trata de un programa tendiente al fortalecimiento de competencias comportamentales y el desarrollo de conocimientos específicos para lograr un desempeño superior, de quienes tienen a su cargo niveles de responsabilidad complejos y deben tomar decisiones de forma asertiva y ágil.
Retos, evolución de amenazas y transformación
El programa benefició a Capitanes de Navío y Capitanes de Fragata de la Armada. No obstante, se incrementará de manera paulatina el número de convocados para formarse no solo en negociación, sino también en otro tipo de habilidades como la comunicación asertiva, la toma de decisiones, entre otras.
El programa general busca brindar herramientas de análisis para realizar evaluaciones sobre los escenario de seguridad, entender su funcionamiento, desarrollar planes de acción adecuados y proponer la estructura de fuerza necesaria para el cumplimiento de sus fines.
Para la Armada Nacional, formar a su talento humano resulta determinante para cumplir sus objetivos en tres contextos clave: los retos operacionales, la evolución de las amenazas en materia de seguridad, y los procesos de transformación del sector Defensa.
A ello se suman los intereses marítimos de la nación, de los cuales depende la posibilidad de que Colombia se convierta en potencia bioceánica sostenible en 2030.
Negociación, intrínseca en los oficiales
Según el Vicealmirante John Fabio Giraldo Gallo, Jefe de Formación, Instrucción y Educación de la Armada Nacional, la negociación es una competencia intrínseca de los oficiales navales.
En concepto del alto oficial, una formación en la materia les permite interiorizar herramientas interpersonales que fomentan la cooperación de terceros, y en la que la inteligencia emocional que se involucra “para alcanzar objetivos de forma ágil y con mínima fricción ante los diferentes actores cobra vital importancia”.
En los esquemas de negociación, “entender los sesgos cognitivos y aprender a extraer información crítica para la disminución de riesgo facilitan la gestión del oficial”, explicó.
Y añadió que, en todo caso, las estrategias, los planes y los programas requieren financiación, aspecto que queda inmerso en procesos de negociación, “donde los gastos de funcionamiento, de personal y de inversión son los que viabilizan el nivel de cumplimiento de objetivos”.