Sinergias para propiciar la empleabilidad de jóvenes
En desarrollo de la alianza CESA-Unilever, se llevó a cabo este lunes la primera sesión de un ciclo de talleres de cocreación de oportunidades para jóvenes en búsqueda de su primer empleo.
Se trata de un proyecto al que le dio vida la reconocida multinacional, que tiene como fin atacar una problemática que está incidiendo en las expectativas de enfrentar la vida adulta de los jóvenes: el desempleo juvenil tanto de Colombia como de la región.
En la sesión de discusión de propuestas para oportunidades de empleo.
Sobre el empleo de jóvenes en el Colombia
Según el DANE, el desempleo de jóvenes colombianos (entre los 15 y 24 años) se encuentra por el orden del 21%. En América Latina, según la OIT, el 2022 cerrará con alrededor del 20,5%.
Si bien 194.000 jóvenes más salieron del desempleo en el primer trimestre del año en el país, en comparación con la misma época del año pasado, todavía hay más de 1,3 millones de personas jóvenes sin empleo. La pandemia, por los confinamientos, dificultó aún más el acceso al mercado laboral.
Bajo este contexto se llevó a cabo esta primera sesión de cocreación de oportunidades, que contó con la participación de directivos de startups, jóvenes estudiantes o recién egresados, representantes de empresas y fundaciones, y varios actores del sector educativo como lo son universidades, el SENA, la Secretaría de Educación del Distrito a través de su Agencia de Educación Superior, Ciencia y Tecnología (ATENEA), entre otros.
- Los pendientes para un mercado laboral inclusivo
- Formación en gestión empresarial, alternativa contra el desempleo juvenil Según Erika Ordóñez, Project Manager Young de Unilever, la sesión buscó crear conexiones y generar las articulaciones necesarias para crear un movimiento robusto de empleabilidad juvenil. Resaltó que uno de los objetivos es incidir favorablemente en por lo menos dos de los 17 ODS: educación de calidad y empleo decente para el desarrollo económico.
Mauricio Salazar (izq), CEO de Social Colectivo, y Emilia Restrepo, rectora del CESA.
Para Emilia Restrepo, rectora del CESA, es palpable el desencanto de la juventud, y para hallar salidas a esa situación no solo hay que trabajar fuertemente en el sector educativo y desde los primeros años de formación, desde la niñez, sino además de manera articulada, entre varios actores.
Según la rectora, hoy se requieren habilidades socioemocionales o actitudinales (soft skills) que no se aprenden exclusivamente en la educación superior ni solo a partir de los 18 años. Asuntos como la autonomía, la empatía, el pensamiento crítico, la capacidad de resiliencia son las que están marcando las capacidades de los seres humanos para enfrentar el futuro.
Esta primera sesión consistió en plantear de forma conjunta, con base en las experiencias de cada sector y expectativas de los jóvenes, ideas para la configuración de estrategias y planes que fomenten sus capacidades, y con ello, una efectiva vinculación al sector productivo.
La actividad contó con la participación de varios jóvenes menores de 24 años, entre ellos estudiantes del CESA que dentro de sus actividades trabajan en varias iniciativas de apoyo al empleo. Esto con el fin de que puedan hacer aportes así como sustraer elementos clave de los demás asistentes para sus proyectos. En total, el evento reunió alrededor de 50 personas.