Teaching peace building Colombia

La paz, asunto para construir desde lo local

Las coordenadas de lo que sería una ‘hoja de ruta’ de una educación para la paz, así como por qué la innovación social y la ética en los negocios son componentes que juegan para dicho propósito, hacen parte de algunos de los aspectos clave que arrojó el encuentro Enseñanza para la construcción de paz, ética empresarial e innovación social; iniciativa del CESA, en alianza con el Instituto Kroc (Centro de Estudios Internacionales de Paz de la Universidad de Notre Dame), con el apoyo de la Embajada Americana. Este encuentro es la continuación de la alianza de Universidades por la Paz realizada el año anterior, y en la que participaron siete instituciones.

Con más de 40 participantes, la mitad de ellos de fuera de la capital y el 70 por ciento de universidades colombianas, expertos hicieron consideraciones en cuanto a lo que significa una educación para la paz.

En ese sentido, trascendió la necesidad de entender lo que significan los estudios sobre paz y –por otro lado- lo que implica hacer estudios para la paz. Mientras que los primeros se centran en una lectura sobre el tema, la acción misma de los segundos debe contribuir a alcanzarla.

Para el profesor George López, del Instituto Kroc, uno de los principales referentes mundiales de estudios internacionales de paz (Universidad de Notre Dame –EE.UU.-), en esa hoja de ruta es necesario entender que hay un futuro compartido que implica ser capaces de transformar el conflicto. Esto es un proceso en el que es clave la articulación entre la academia y la comunidad, y resulta imperativo un diálogo permanente con los actores locales. Para el profesor López, “los programas de estudios de paz surgen mejor a partir de un contexto comunitario”.

Otro de los componentes o coordenadas son el qué y el quién en las narrativas de la historia del conflicto. Por vía de ejemplo, George López trajo a colación el caso de España donde se dio paso al reconocimiento del pueblo vasco en la historia del país como alternativa de reconciliación.

En el caso de Colombia, ello se traduciría en el “reconocimiento de los dilemas de las personas en el campo, así como de las personas que han sido marginalizadas y vulneradas en el pasado”.

Una educación para la paz brinda luces para que problemas que no se discutían estén en el foco de la discusión.

Valor mutuo a través de la ética empresarial

Cómo los negocios y la innovación social pueden aportar a la construcción de paz, son otros aspectos a los que se les trató de dar respuesta en las sesiones.

El profesor Philip Nichols, experto en el tema de corrupción y ética en los negocios de Wharton Business School (Pennsylvania University), afirma que hay elementos estructurales que pueden incidir en la corrupción, y que estos son distintos para cada país, por lo que su manejo no siempre es igual. Y sostiene también que el componente ‘ética’ juega un papel clave en virtud de que, además de ser conscientes de las leyes existentes, las buenas empresas lo son de las ‘leyes sociales’. Esto es, de los parámetros o normas que crean las colectividades, un arancel ético que crea la sociedad para permitir o sancionar la actuación de las empresas. Dado que los negocios forman parte de la sociedad y no son ajenos a ella, “si mejora la comunidad, los negocios mejoran”.

Invertir en las comunidades, invertir en la gente, las involucra e incide en que estas se sientan en posiciones no marginales ni vulnerables, y cambien a una posición de inclusión y de esperanza hacia el futuro. Allí es cuando se crean las condiciones para la innovación social, explicó el profesor López.

El encuentro Enseñanza para la construcción de paz, ética empresarial e innovación social, en esencia, permitió reconocer la importancia de generar espacios y oportunidades para analizar cómo resolver conflictividades sin el factor de violencia. “Queremos estar seguros de crear las condiciones en la academia que nos permitan entender cómo encarar de la mejor manera posible el posacuerdo, y ante todo los criterios que sirvan a la enseñanza de la paz para que sea duradera”, puntualizó el rector del CESA, Henry Bradford, en la clausura del evento.