Las 4 claves de un equipo emprendedor exitoso
07 Sep 2023
No hay claridad sobre quién específicamente dijo la frase “solos llegamos más rápido, pero juntos lo hacemos más lejos”; y es más bien atribuida a la sabiduría popular de algún lugar de África, según la inteligencia artificial. Pero de lo que sí hay total claridad, es de que se ajusta como anillo al dedo cuando se habla de la creación de empresa y de negocios en el mundo del emprendimiento.
Lo que han demostrado las observaciones acerca del rendimiento de los emprendedores es que es mucho mayor y tiene más vigencia cuando existe un equipo emprendedor, que cuando se trata de llaneros solitarios en una lucha sin cuartel en los mercados (siempre hostiles), muy a pesar del viaje del héroe que tiene cada emprendedor, que en todo caso también es real.
Mejor en equipo
La cifras hablan por sí solas. Según estudios de Rockstart, aceleradora holandesa, pero una de las más reconocidas en el mundo por su apoyo a emprendimientos y startups en todo el mundo, dan cuenta que fundadores solitarios se demoran tres veces más en escalar su negocio, que cuando detrás de la empresa a dos o tres fundadores.
También han constatado que la interdisciplinariedad del equipo tiene gran peso en la consecución de capital y crecimiento de clientes. Equipos balanceados, con un emprendedor de negocio y uno técnico, levantan 30% más de capital y crecen dos veces más en usuarios.
El peso de un equipo emprendedor es tal, que los problemas y fracasos de los negocios, tanto para fundadores como para inversionistas, pasan por ellos.
En efecto, cuando se pone la lupa sobre las razones por las cuales fracasan las startups, la falta de un Product Market Fit (PMF), la falta de experiencia o conocimiento de la industria y un equipo fundador poco cualificado, son las tres principales para los inversionistas. Y les siguen la falta de flujo de caja y los problemas dentro del equipo fundador.
Como en un matrimonio
Desde la óptica de los fundadores, la falta de fondos, de nuevo la ausencia del PMF y los problemas entre socios, son las principales razones del descalabro de las startups.
Además de que evidentemente el PFM resulta vital en el emprendimiento, claro es que las sociedades en el mundo de los negocios pueden ser tan sensible como lo son los problemas en el matrimonio por plata (presupuesto para ejecutar), hijos (clientes y(o) empleados), sexualidad (desempeño), dedicación (tiempo), celos (competencia), la familia de la pareja (alianzas).
De allí que una mirada a la caracterización de un equipo emprendedor resulta trascendental para el porvenir de cualquier empresa.
En esencia, un equipo emprendedor que aspire a tener buenos resultados tiene cuatro características: una mentalidad de crecimiento, tener una misión revolucionaria, foco en el cliente y las bases para construir un equipo.
Mentalidad de crecimiento
El mindset que hay detrás del emprendedor es el del aprendizaje continuo. En esa medida, hay una tendencia en sus emprendedores por inclinarse a resolver los problemas más difíciles. Muy a menudo, explica la directora del Centro de Innovación y Emprendimiento del CESA, María Jimena López, los emprendedores que eligen resolver problemas poco retadores desertan con facilidad de proyectos de largo aliento.
Los emprendedores con mentalidad de crecimiento:
- Ejecutan rápidamente para aprender
- Celebran los errores y aprenden de la experiencia
- Toman decisiones basados en la evidencia
- Buscan soluciones simples
Misión revolucionaria
Es sentir que el cambio no solo es posible sino que hay que hacerlo. Un convencimiento de que para aquello en lo que se empeña un esfuerzo hay que hacer una revolución.
Y mucho de ello tiene que ver con la motivación, que combina tres componentes:
- Alinearse o enfrentarse con aquello que apasiona o molesta plenamente
- Alinearse con aquello en lo que se cree que se puede ser el mejor
- Construir algo que genera valor.
Charles Krulak, quien fuera comandante del grupo de marines de EE.UU. durante la guerra del golfo, aseguraba que la motivación resultaba más fácil cuando “transformamos una pesada tarea en una decisión, (pues) hacerlo nos da una sensación de control”. Y sin duda, hacer empresa es una tarea pesada cuyo control de su fundador es definitivo.
Foco en el cliente
Además de crecer siete veces más de lo que no lo hacen, los emprendedores que oyen y logran entender a su cliente a profundidad:
- Mejoran de manera sistemática el producto
- Mejoran sus estrategias y canales de conversión y retención de clientes
- Pivotean antes de que se les acabe la plata y la energía
Implicaciones del equipo
Como ya se dijo, constituir un equipo es mejor que andar en solitario, pero tiene sus matices como ocurre en las relaciones de pareja. Al principio todo es color de rosa.
La visión y compromiso de cada uno de sus miembros, así como los asuntos tras la toma de decisiones, son elementos sensibles que aparecen en la ecuación.
De los mismos estudios de Rockstart, trasciende que 8 de cada 10 fundadores que fracasaron es porque no estaban alineados en la misión. No sabían lo que querían ni tenían claro hasta dónde estaban dispuestos a llegar.
Así mismo, 7 de cada 10 fracasaron por problemas derivados de diferencias en los grados de dedicación y compromiso.
- Como los consensos se acaban rápidamente, es crucial tener conversaciones difíciles y ser transparentes, pues no hacerlo sacrifica calidad por mantener el trabajo.
- Las conversaciones deben basarse sobre hechos y no sobre opiniones.
- Hay que discutir rápidamente, pero hacerlo, pues problemas pequeños pueden convertirse en imparables bolas de nieve.
- A la hora de tomar decisiones, es clave poner el negocio por encima de las motivaciones personales.
- Debe haber una última palabra. Ninguna empresa marcha con más de un CEO.
- Medir constantemente y hablar con los clientes mantiene enfocado al equipo en lo que realmente mueve la aguja del negocio.