¿Filosofía? ¿En las empresas?
La idea podrá parecer extraña para algunos, pero no es novedosa. En las grandes empresas de tecnología ha estado ya, desde hace décadas, la presencia de la filosofía y las humanidades como dos herramientas clave para innovar y afrontar problemas estratégicos.
Filosofía en las grandes empresas: del pensamiento a la estrategia
Reid Hoffman, fundador de LinkedIn, es filósofo de formación, y ha usado su mirada humanista para entender y predecir el desarrollo tecnológico.
Alex Karp, cofundador y director ejecutivo de Palantir Technologies, realizó su doctorado en teoría social junto a una de las celebridades filosóficas alemanas: Jürgen Habermas.
La filosofía puede y debe aplicarse a los problemas empresariales. Con nuestro espíritu innovador, queremos ser pioneros de enseñar filosofía aplicada las escuelas de negocios en Latinoamérica.
Pensar distinto, la clave filosófica detrás de la innovación
La innovación depende de algo que no dan ni la tecnología, ni el capital financiero: la capacidad de cuestionar permanente los paradigmas con los que vemos el mundo. La verdadera innovación nace cuando aprendemos a ver el mundo con ojos nuevos y a pensar con nuevos modelos mentales, según enseña el filósofo Luc de Brabandere, consultor de BCG y exdirector de la Bolsa de Bruselas.
La filosofía nos ayuda a cuestionar frente a creencias y prejuicios. Nos enseña a hacer preguntas -como lo hacía Sócrates con su mayéutica, a dudar como Descartes- y a pensar de forma crítica, algo que hoy más que nunca necesitamos.
La filosofía está en el centro de los problemas del liderazgo corporativo. Todo líder debe enfrentar problemas morales. ¿Invierto en un proyecto con un gran impacto en desarrollo económico, pero quizás con efectos perjudiciales para el medioambiente? ¿Cómo balanceo el mérito con la posibilidad de ser incluyente con grupos poblaciones históricamente excluidos? ¿Privilegio la formación o la confianza? Todas son preguntas que conducen a una cuestión esencial para el líder: ¿qué es actuar correctamente?
IA y filosofía, una alianza para comprender el futuro
Las preguntas éticas son preguntas de negocio. Como enseña Haridimos Tsoukas, profesor de Warwick Business School, una cuestión como la estrategia, que tanto les importa a las compañías, es una pregunta ética: ¿por qué el bienestar del futuro es tan importante como el bienestar del presente? Sólo una posición ética que valore el futuro vuelve central la pregunta a la que responde la estrategia, a saber, cómo crecer de forma rentable a lo largo del tiempo.
Por esta razón no nos sorprende que, en Colombia, Alfredo Hoyos, fundador de Frisby, haya dicho poco antes de su muerte que la filosofía, las humanidades y la meditación habían sido fundamentales para construir una de las marcas más icónicas del país.
Por supuesto, la filosofía es hoy muy relevante para los cambios sociales y humanos que está trayendo el desarrollo de la inteligencia artificial. Como decía Pia Lauritzen en un artículo reciente en Forbes, el advenimiento de la IA demanda filósofos, no sólo expertos en tecnología. Es la filosofía la que nos puede ayudar a pensar en las posibilidades y límites de la IA, tal como lo ha hecho en el último medio siglo con filósofos como Hubert Dreyfus.
Bootcamp de filosofía y negocios
En el CESA queremos jugárnosla por la unión de la filosofía con los problemas empresariales porque sabemos que una mirada humanista puede ser el complemento transformador de las posturas dominantes de negocios. Son los líderes con alma filosófica los que pueden llegar a provocar las conversaciones que transforman equipos y organizaciones.
El efecto de pensar diferente es hacer diferente; es decir, la acción creativa y multiplicadora. El diálogo entre la filosofía y los negocios debe ser útil, aplicado y práctico. Por eso hoy le apostamos a convertir las ideas filosóficas en auténticas palancas para los negocios en el bootcamp Herramientas filosóficas para estrategas e innovadores los próximo 12 y el 13 de septiembre, en el CESA.