Desarrollando el potencial de la líder Nutresa
23 Sep 2022
La formación en liderazgo femenino de la mano con el CESA, que en un principio se estableció para sus directivos, está permeando los distintos niveles en el Grupo Nutresa.
Recientemente un grupo de 20 mujeres de Novaventas, la fuerza de ventas de esta organización, inició capacitación en liderazgo femenino con miras a contar con las habilidades que les permitan crecer tanto en el ámbito personal como profesional, al margen de no tener las mismas responsabilidades de las mujeres en los más altos cargos.
Se trata del compromiso de las directivas de Nutresa que tienen claro que cumplir los fines de la organización incluye capacitación y actualización de su talento humano de forma integral y a todo nivel de la organización.
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Liderazgo femenino en todos los niveles
La historia sobre cómo esta organización ha expandido la formación de su talento se remonta a 2019, año en el que Nutresa realizó unas valoraciones internas de sus necesidades.
Los resultados evidenciaron importantes capacidades de su talento femenino para ocupar cargos directivos en el futuro, razón por la cual resultaba imperativo que muchas de ellas adquirieran destrezas en liderazgo.
Es así como en seis promociones el CESA (vienen dos más antes de culminado este 2022), entre el 2019 y el 2021, capacitó a más de 200 mujeres de Nutresa en comunicación, negociación, inteligencia emocional, estrategia. Además, complementada con actividades sobre aspectos culturales que impactan en las posibilidades de éxito de las mujeres como lo son la autosegregación, el autoconocimiento, entre otros tópicos.
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Este tipo de formación ha trascendido fronteras, pues también abarcó el talento Nutresa en otros cuatro países de la región: México, Perú, Panamá y Costa Rica.
Para las versiones que se aproximan, el área de Servicios Empresariales del CESA enriqueció los contenidos con una introducción al gobierno corporativo y su papel en el juego de la sostenibilidad, así como con una prueba de comportamiento que permite medir las habilidades para el liderazgo y la percepción sobre la persona llamada a ser líder.
Esto es clave si se tiene en cuenta que la personalidad, que define el liderazgo, se manifiesta de forma distinta y tiene una influencia diferente en los contextos organizacionales que en los sociales o familiares.
Además, incluye un capítulo que explora las nuevas masculinidades, con algunos directivos invitados, pues para la organización las oportunidades para el talento femenino deben estar acompañadas también por una alta dosis de consciencia también de los hombres.
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En la más reciente formación para el talento de Novaventas, la marca que tiene el grupo Nutresa de su catálogo de productos, el reconocimiento personal, la adaptación y la resiliencia, la empatía, y fundamentalmente la negociación y la visión de futuro son temáticas de amplio tratamiento para las mujeres que se están capacitando.
Para Verónica Uribe Mejía, líder de Comunicación Comercial de Novaventas, el diplomado genera sentido en la medida que es una industria muy femenina y en la que se impactan mucha mujeres. “Nos habilita en nuestros primeros círculos de influencia, la familia y el trabajo; pero al final es un punto de partida para ser mejores seres humanos”.
Explicó que esta capacitación “nos permite entender de qué me tengo que hacer cargo primero; es decir, hacia mí, pero me habilita para dejar una huella mucho más poderosa construyendo con otros”.
Añadió que las conversaciones con Claudia Varela, coach en el programa, “provocan y abren miradas”. Además, impulsan a descubrir ese liderazgo de las mujeres y a que sean conscientes sobre “cómo podemos romper el llamado techo de cristal para desarrollar todo nuestro potencial”.
Por su parte Marlin Tatiana Peñaloza, gerente zonal, calificó la formación como “un espacio de descubrimiento” que le permitió enfocarse en retomar su propósito, independientemente de su situación de vida, empresa donde esté u otras circunstancias.
Explicó que ha sido una muy buena oportunidad para aprender a ser coherente “entre lo que digo y lo que hago, a controlar mis pensamientos y emociones, y como líder, a no controlar sino a acompañar, y saber delegar”.